Retrato de un comunicador
Por Juan Manuel Chaves
Publicado en Sala de Redacción, portal de la Licenciatura en Comunicación de la Universidad de la República.
La comunicación te da sorpresas. El 4º Encuentro de Jóvenes Comunicadores, que tuvo lugar en Trinidad el pasado 4 y 5 de julio, fue concebido para que los periodistas y estudiantes compartan sus impresiones sobre la labor y la responsabilidad del comunicador. Esta fue la base del evento y así se desarrolló.
Pero la consigna, al parecer, no fue bien entendida por todos los panelistas. El sábado a la tarde el informativista Fernando Vilar, de Canal 4, desarrolló su presentación. Nadie esperaba algo distinto a la línea que se venía exponiendo.
Llegó dos horas más tarde de lo previsto. De todas formas, la Organización pudo modificar el orden de presentaciones para que Vilar tuviera su espacio. De alguna manera, la deferencia obedecía a la figura de Vilar, uno de los informativistas más reconocidos de la TV. En 2008, además de presentar las noticias del informativo central de Canal 4, fue designado jefe del informativo. Pero Vilar no aquilató el gesto. Estaba indignado, al parecer porque debió esperar para realizar su ponencia; la modificación en el orden de oradores lo llevó a tener que demorar su exposición. No era sólo eso lo que lo alteraba: parecía intuir lo que iba a venir.
Se presentó como “conductor de un programa de entretenimientos”, lo que despertó la sorpresa de todo el auditorio. Su exposición fue más bien un alegato ante las críticas que recibe por el informativo. Nadie lo había atacado aún, pero él ya se estaba defendiendo. Su programa es cuestionado principlamente por el perfil que le da a las noticias, sobre todo a las policiales. “Acusan al informativo de amarillista, pero no lo es”, sostuvo el orador.
Expresó que “hay programas muy buenos en Televisión Nacional, pero los ven 15 mil personas. Mi programa lo miran 300 mil, por lo que tan malo no debe ser”. Para Vilar lo único que importa es mostrar lo que a la gente le gusta; en ese enfoque “todo vale”.
Las caras de asombro dominaban la sala, muchos comenzaban a murmurar. Vilar prefirió provocar al auditorio: afirmó que todo (en televisión) lo hace por la plata y “si algo vende, vá”. El público reaccionó: un señor sentado en primera fila se levantó y atacó verbalmente. Vilar respondió en forma despectiva: “No sé si mi programa es bueno, a mi me miran 300 mil personas”. Con esa afirmación Vilar intentó cerrar su presentación. El moderador del evento propuso una instancia para las preguntas. El “conductor del programa de entretenimientos” aceptó a desgano.
- “¿Por qué pone música en las noticias policiales?”, preguntó un joven participante.
- “La musiquita gusta, entonces se queda”, respondió Vilar.
- “¿Considera que el periodismo se debe hacer sólo por lo que a la gente le gusta, sin importar lo que se muestra?”, consultó otro estudiante.
A lo que Fernado Vilar respondió: “Un circo está para hacer plata, mi programa hace lo mismo”.
- “Entonces ¿el periodismo es un circo?”, repreguntó el joven.
- “No. ¡Me estás haciendo enojar! Por favor, sólo voy a contestar preguntas interesantes”.
Esta afirmación, en lugar de desmotivar a los jóvenes a preguntar, los entusiasmó. Varias manos se levantaron, todos querían conocer en profundidad el sentido de la labor periodística que concebía Vilar.
“Voy a contestar sólo dos preguntas más porque mañana tengo que levantarme a las nueve para hacer el informativo” afirmó Vilar. El público repudió esta situación y comenzó a retirarse del salón masivamente. Era una forma de rechazo al contenido de sus palabras, a la forma en las que las dijo y por rehusarse a responder más preguntas. Fernando Vilar hizo lo mismo, se levantó y se retiró velozmente. Los organizadores ni siquiera pudieron entregarle una estatuilla y un obsequio que tenían previsto.
Nadie lo podía creer. Ni los periodistas presentes ni los estudiantes.
Miguel Nogueira, conductor de "Buscadores", era el próximo orador. Se disculpó, dijo no poder realizar su ponencia en ese ambiente. No llegaba a comprender la actitud de su colega y temía que que sus emociones lo traicionaran.
Los comentarios impregnaron la segunda jornada de "Comunicarte".
http://www.cursosparalelos.com/2009/07/el-circo-de-fernandito.html