No sigue ninguna cábala específica antes de salir a escena. Para entrar en ambiente escucha alguna pista de Sinatra, Michael Bublé o cualquier otro intérprete de jazz.
En varias ocasiones, recurre a la foto de Olmedo -su mayor referente- que también lleva en su Ipod durante la previa en el camarín. "Así me incentivo", comenta Maxi de la Cruz. Pero hay una fija que jamás abandona y no falla: testear los shows. "Nunca llego a un espectáculo sin probarlo con el público". La primera edición de Maxi Solo Stand Up Show la pre estrenó en pequeños bares de Buenos Aires, y tras comprobar la eficacia, la hizo cruzar el charco. "Funcionaba bien pero tenía que adaptarle cosas. Por ejemplo, en vez de decir voy a correr a la Rambla, decía voy a Palermo", cuenta. Esta vez, eligió fiestas o eventos privados para experimentar, y así ensayó mientras trabajaba. "No podés hacer este tipo de espectáculos por primera vez en un teatro porque estás jugado, no sabés por dónde va a reaccionar la gente", confirma.
Control de testeo mediante, el show está redondito y pronto para regresar al escenario. Maxi Solo Stand Up Show 2 se estrena en la Sala Teatro Movie Center el jueves 14 de octubre con dos funciones (20:00 y 22:45 horas) que ya tienen cartel de localidades agotadas. El éxito motivó dos nuevas fechas que tendrán lugar el miércoles 20 de octubre y el jueves 21, también con funciones dobles. Un día antes, el 19, habría un función especial para prensa y amigos y que será grabada por Telodoce y transmitida luego por ese Canal. Las entradas ya están disponibles y sólo se pueden adquirir en la boletería del teatro entre 17:00 y 22:00 hs.
Para adelante, es probable que Maxi Solo 2... continúe con funciones fuera de Montevideo. En verano, en tanto, Maxi de la Cruz hará temporada de Mar del Plata con Aníbal Pachano en el espectáculo Pour la Gallery, participación que le valió el Premio ACE a la Revelación Masculina en teatro que recibió en Argentina.
¿Cambios con respecto a la primera parte Maxi Solo? "Todo, es otro espectáculo", aunque conserva el nombre. Repetirá la orquesta que lo acompañó el año pasado y la idea es que su padre vuelva a estar presente, pero dependerá de los madrugones: "Al menos, en el estreno va a estar", adelanta el hijo de Cacho. Se incorporarán cambios de vestuario que antes no se daban, monólogos, y sketches con nuevos libretos. Volverá el Richard, y se sumará Maneiro, personaje que se originó en Telemental, gustó, pegó, y Maxi lo aprovechará. Interpretará dos canciones, hará fonomímica y agregará un quinteto de bailarinas a la escena que desarrollarán cinco números. El cómico aún no se anima a hacer coreografías, pero no rechazaría una propuesta de Marcelo Tinelli para una futura edición de Bailando, si algún día le cae. "¿Por qué no?", es su respuesta.
En uno de sus viajes relámpagos a Montevideo para grabar Cantando en la oficina, Maxi de la Cruz acomodó su agenda para charlar con Sábado Show acerca del estreno en el Movie, su trabajo en Argentina con Pour la Gallery, la relación con el elenco y el galardón a Revelación Masculina que recibió en la otra orilla.
Anti escritor. Guarda la mayoría de sus historias en el disco duro de su cabeza porque la redacción no es su fuerte. El motivo es conocido y repetido: la falta de concentración. Esa misma razón también lo desvinculó de los libros, y lo alejó del estudio años atrás. "Cero lectura. Mi hija de 8 años lee mucho más que yo hoy día", dice en tono gracioso. Maxi no tiene facilidad con el lápiz y papel, pero es un rayo a la hora de memorizar los textos: un par de leídas bastan para que se aprenda los parlamentos a la perfección.
Se sentó contra su voluntad a redactar y detrás de los monólogos desordenados que desarrollaba hacía tiempo en los eventos privados, encontró un potencial show a explotar: "Dije, bueno, tengo todo esto, voy a armar algo, y al escribirlo me di cuenta de que tenía un espectáculo largo, y ordenándolo un poco se armó", recuerda. No tuvo otra alternativa que organizarse: "Lo escribí obligado para registrarlo en Agadu".
En esta oportunidad lo ayudó su amigo Fernando Trota (hijo del actor Alejandro Trota que trabajó en El show del mediodía): "Entre los dos lo fuimos armando". También cooperaron las horas de vuelo, barco y ómnibus que acumuló últimamente: "Ahora escribo mucho mientras viajo porque no tengo nada para hacer y no me desconcentro. Ayer venía de Córdoba y escribí una parte del monólogo de Maneiro en el celular", relata mientras lo muestra.
Segunda parte. El objetivo es aprovechar las comodidades que ofrece la Sala Teatro Movie Center, y por eso Maxi y su producción decidieron instrumentar otra vez el recurso del circuito cerrado. Éste consiste en una cámara gigante que seguirá al cómico durante todo el show, y permitirá que los espectadores puedan verlo desde la última fila.
El Richard y sus cumbias continuarán robando carcajadas al público. El cariño que le profesa responde a que fue el primer personaje que dio a luz: "Le fui encontrando la vuelta y me costó", comenta al tiempo que reconoce habérselo "choreado" a Franklin Rodríguez. Éste lo creó para Debajo de las polleras y Maxi fue quien lo interpretó. A partir de esa actuación, quedó enganchado, y le adhirió tintes y parlamentos propios, pero tuvieron que pasar cinco años para que lo retomara: "Me había quedado en la cabeza porque tenía algo armado ya, lo metí y fue la primera vez que hice un personaje, más allá del teatro", relata. Su tan querido Richard irá con el mismo vestuario porque "no le da para comprar otra cosa", bromea el cómico, quien sí se cambiará la indumentaria a lo largo del espectáculo, al igual que las bailarinas.
Maxi elige no reservar espacio para la improvisación en sus show, pero si se da, no la frena. "A veces te surgen cosas producto de la adrenalina, y si me las acuerdo las dejo para futuras presentaciones". Tampoco le entusiasma meterse con el público e incomodarlos: "La gente va y se sienta a verte para que labures vos. No me gusta usarlos para hacer humor", declara.
Tampoco faltará la fonomímica a la cita, idea que tomó de su padre y la desarrolla con su estilo: "Está bueno porque él lo hacía hace mucho tiempo, funciona, y yo le pedí permiso para usarla", comenta quien suele escuchar atento los consejos de Cacho, y hacerle alguna devolución cuando su padre se la pide. "Hay un feedback importante. Él me consulta cosas y yo a él", agrega.
Argentina. Está contento en la vecina orilla, aunque dice no vivir en ningún lado: "Voy y vengo. En mi casa de Buenos Aires estoy por unas horas y me voy", comenta. Pasó el verano en la calle Corrientes "muerto de calor", y ahora está de gira con Pour la Gallery. "Nos va bien en todos lados. La gente se va contenta, lo recomienda, y por más promoción que tengas, el boca a boca es muy importante", destaca. Tiene buena relación con todo el elenco y se siente a gusto porque es "gente joven, no hay problemas de cartel ni de estrellato". No le interesan los escándalos y nunca protagonizó ninguno, pero si tuviera la chance de trabajar junto a Tinelli aceptaría sin dudar: "La televisión te da más popularidad y es una forma de capitalizar otras cosas. Tenés pantalla y lo podés aprovechar para armar tus espectáculos", dice. Agrega que jamás espera que lo llamen ni lo ayuden; se la rebusca, y se define como un "generador" de contenidos propios: "No es por un tema de ego, sino de necesidad".
Apenas llegó a Argentina nadie lo conocía ni sabían de su carrera, ni dentro ni fuera del elenco. Sus compañeros hoy le confiesan que incluso le preguntaban a Pachano quién era, y lo buscaban en Youtube para saber de él. Dice que jamás fue con la estampa de ser "hijo de". "Nadie me abrió puertas por eso, ni tienen por qué hacerlo. Bárbaro tu papá, pero vos qué hacés", apunta. Hoy tiene esa respuesta tiene fundamento, y trasciende el trabajo y esfuerzo personal: se llama premio Revelación Masculina de ACE. "Tiene un plus porque es otro país, no te conoce nadie y que te hayan visto y considerado es muy importante. Está bueno que se hayan fijado pero queda en eso", resume Maxi de la Cruz.
Fotos de tapa e interiores: Inés Guimaraens.