Cuando los españoles llegaron a América se encontraron con muchas cosas nuevas como la papa, el maíz, el tomate, la mandioca y la "yerba". De los habitantes nativos de América ( que los españoles llamaron indios al pensar que habían arribado a la India ) aprendieron a beber esta infusión y les causó una extrañeza la cantidad de veces que lo hacían por día. En un principio estuvo prohibida, con pena de "excomunión", por los curas jesuitas. Es que sostenían que esa bebida hecha con raíces de "hierbas" era la "ruina de estas tierras, porque hace a los que toman, flojos, holgazanes, sin honra....", refiriéndose a ella como un vicio.
Antiguamente los indios llevaban, junto a las armas, unas pequeñas bolsas de cuero ( "guayacas" ) en los que guardaban hojas de yerga mate triturada y tostada que masticaban o colocaban en una calabaza con agua y sorbían ya sea usando sus dientes como filtro o por medio de un canuto de caña. Según los españoles estas hojas les daban mayor resistencia para las largas marchas o en las labores diarias.
Las zonas por excelencia de la Yerba Mate eran los territorios comprendidos actualmente por parte de Paraguay y en las provincias argentinas de Corrientes y Misiones. Los españoles comenzaron a beber este brebaje en un recipiente de labios gruesos denominado "Bernegal" del cual bebían utilizando un apartador en forma de cuchara con orificios, con el cual separaban el agua de las hojas. Bautizando el "caa" de los guaraníes como simplemente Hierba del Paraguay o Yerba, dado que, como la conocieron antes de saber de dónde se obtenía, no sabían que su origen era de un árbol.
Fue aceptada como bebida estimulante, al igual que el té, cuando los personajes más importantes de la ciudad de Asunción la incorporaron a la dieta. Como la yerba había que cosecharla en la Provincia de Misiones o en el interior de Paraguay, en el "Infierno Verde", los jesuitas decidieron comenzar a colocar plantaciones en lugares más accesibles.
Actualmente el mate se consume en gran parte de Sud América: Suroeste de Brasil, Uruguay, Argentina, Paraguay, parte de Chile y parte de Bolivia. Siendo el mayor productor y consumidor mundial Argentina.
Proceso Productivo:
El cultivo de la yerba mate comienza con la siembra, realizada entre los meses de febrero y marzo. La germinación es dificultosa ya que el 80 % de la semilla está constituida por tegumentos y sólo el resto por el endosperma y la radícula. Luego de aproximadamente seis meses se seleccionan las plantas mejor desarrolladas y se las repica a macetas entre octubre y noviembre. El transplante definitivo a campo se realiza en la temporada otoño-invernal.
Las pequeñas plantas requieren de protección contra la intensa insolación y los vientos, lográndose con estructuras colocadas alrededor de las plantitas llamadas “ponchos” realizadas con diversos materiales, como cañas o tablitas. En general, pueden plantarse con 3 a 4 metros entre líneas y con 2 a 3 metros entre plantas, según la densidad buscada.
Respecto de los manejos culturales, se realiza una pasada de rastra de disco entre líneas para el control de malezas y una carpida manual entre plantas tanto en primavera como en otoño, fuera de la época de cosecha. Se aconseja una fertilización cada tres años aproximadamente con nitrógeno, fósforo y potasio, teniendo en cuenta mantener una relación 4:1:1 y 2:1:1.
Beneficios:
El mate es un excelente tónico y depurativo, lo segundo por su carácter diurético. Su capacidad diurética explica una "paradoja" de la "dieta gaucha" hasta inicios del siglo XX: hasta entonces los habitantes de las zonas rurales del Cono Sur solían tener una dieta hiperproteínica sin aparente contrabalanceo, lo cual hubiera provocado –en el más benigno de los casos– una elevadísima concentración de urea que se reflejaría rápidamente en afecciones imposibilitantes como la gota. Sin embargo, la diuresis que se lograba por la elevada ingesta de mate contrapesaba los excesos de una dieta hiperproteica. El mate, por otra parte, posee excelentes antioxidantes. Según las conclusiones de un estudio llevado a cabo en Estados Unidos, el consumo de mate puede reducir el colesterol LDL o colesterol "malo", a la vez que promueve el aumento de colesterol HDL o colesterol "bueno". La investigación afirma que el mate tiene propiedades que inducen la actividad de importantes enzimas antioxidantes en el organismo; una de las más importantes es la paraoxonasa-1, que ayuda a retirar el colesterol malo y tiene efectos cardioprotectores. También aporta el mate (especialmente si es bebido mediante el "cebado" con bombilla) elevados niveles de xantinas y hasta doce beneficiosos polifenoles entre los cuales se destacan el ácido clorogénico y la quercitina.
Otra característica (actualmente casi anecdótica) fue bastante fortuita: los combatientes criollos o gauchos durante la Guerra de la Independencia obtenían la mayor parte de su agua a través de la ingesta de infusiones y decoctos de mate, de este modo el agua era purificada de gran parte de las bacterias y posibles parásitos; los europeos (españoles y mercenarios) que solían considerar al mate como algo "bárbaro" o "primitivo" bebían las aguas sin el necesario caldeado, por lo cual contraían con frecuencia parasitosis.
Por lo anterior se observa que el mate es una bebida beneficiosa sólo contraindicada en casos de personalidades muy ansiosas, padecientes de insomnio o de algunas disfunciones renales severas.
Como se ha observado recientemente con el café, el mate favorece la atención y con ello las actividades intelectuales. Resulta asimismo un buen antidepresivo; a diferencia del café bebido en exceso, no se han registrado fehacientemente casos de insomnio debidos al mate, esto puede deberse a que el mate se bebe bien diluido en agua y es consumido preferentemente a la mañana o hasta el mediodía; por otra parte la diuresis que provoca el mate elimina rápidamente los catabolitos de alcaloides de la cafeína al mismo tiempo que depura al organismo de toxinas.
Tipos de mate:
Mate amargo:
En gran parte del Río de la Plata se prefiere beber el mate sin endulzarlo como lo hacen en Argentina y Uruguay, a ésta acción en Brasil se le dice cimarrón, se entiende por esto al mate no endulzado, aunque en ciertas zonas el significado se invierte. Muchas personas opinan que el mate debe ser tomado de esta forma, considerando al mate dulce (sea por el agregado de azúcar o de algún otro endulzante) como una especie de profanación. "Cimarrón" era el nombre que se daba antiguamente en el campo al ganado salvaje, especialmente, al caballo, que estaba tan ligado al gaucho.
Mate dulce:
Es considerado por los tradicionalistas como un mate falso, y la diferencia consiste en que en cada cebada se incorpora azúcar a gusto del bebedor; también se usa cuando en la ronda hay niños presentes. Esta forma de preparación es muy difundida en Argentina, entre los habitantes de Santiago del Estero y, aunque no tanto, de Buenos Aires y sus alrededores. También se lo denomina mate entrerriano por la costumbre arraigada en Provincia de Entre Ríos de agregarle azúcar al mate.
La calabaza donde se toma mate cimarrón jamás se usa para consumir mate dulce, ya que el sabor del azúcar perjudica su posterior utilización para un "amargo", se dice que se "estropea el sabor" del mate.
Quienes acostumbran a tomar mate amargo suelen considerar que el dulce no es mate. Un dato gracioso: En Uruguay se suele decir que los hombres que toman mate dulce son golpeados por sus mujeres, una vieja creencia para desprestigiar a este mate, por lo que es muy difícil ver un hombre tomar este mate (por lo menos en público); en cambio, en la mujer es muy común.
Mate de leche:
La diferencia con el mate amargo es que en lugar de cebar con agua, se lo hace con leche (o leche condensada) y azúcar. Esta variante tiene la desventaja de no poder limpiar fácilmente la bombilla y el mate, por eso suelen utilizarse unos distintos a los de las variantes tradicionales.
Mate con otras hierbas:
Es posible adicionar otras hierbas ( "yuyos" ) a la infusión (tanto al agua con que se ceba el mate como directamente a la yerba mate) para darle un sabor diferente o con fines medicinales. Es común el agregado de hierbas con propiedades digestivas o sedativas, por ejemplo: coca, peperina, poleo, melisa, toronjil, menta, "cola de caballo", incayuyo, té de burro, ajenjo, carqueja, anís, etc.
Mate de té:
El mate de té, es considerado otra variante del mate dulce; este mate no se realiza con yerba mate y es muy común en la Provincia de Entre Ríos y muy popular entre los chicos y adolescentes. Como su nombre lo indica, se prepara con té (negro generalmente) y limón como ingredientes principales; no se usa la calabaza del mate, sino algún recipiente similar a una taza ( ya que este mate al ser dulce y con té arruinaría el sabor del "cimarrón" ), lo que tienen en común es que sí se utiliza bombilla. Opcionalmente se pueden agregar una gran variedad de ingredientes siendo populares algunos "yuyos" o hierbas como, por ejemplo, menta, cedrón, boldo, tilo, manzanilla. También es popular agregar algunos otros aditivos como cáscaras de naranja o rodajas de esta misma fruta, trozos de manzana entre otros. Una vez seleccionados los ingredientes y colocados en la taza se agrega el agua caliente acompañando cada cebada de azúcar (o algún edulcorante si se prefiere).
Preparacion del mate:
* Poner agua a calentar y retirarla antes de que entre en ebullición (en lo posible, ponerla en un termo para que no pierda la temperatura).
* Llenar 3/4 parte del mate con yerba.
* Tapar el mate con la mano, darlo vuelta, golpear suavemente la base - para que el polvillo de la yerba quede en la superficie.
* Inclinar el mate unos 45 grados, e introducir la bombilla hasta el final.
* Si se desea tomarlo dulce, introducir una cucharadita de azúcar dejándola caer sobre el extremo de la bombilla.
* Luego verter el agua suavemente hasta que alcance el borde del mate (después de unos segundos, el agua será absorbida por la yerba y bajará su nivel)
* Volvemos a verter mas agua hasta que llegue nuevamente al tope.
* Tomar el primer mate, volver a cebar y convidar al invitado si lo hay.