Montevideo es una ciudad tranquila, una capital con más de un millón de personas, pero que aún mantiene un sentimiento y aire de pueblo preferido por aquellos que realizan unviaje a Uruguay como una forma de escapar del frenesí y la locura de los lugares donde viven. Tomar vacaciones en Uruguay ayuda a bajar el ritmo de vida disfrutando de la bahía, la playa y el sol. Usted puede optar por quedarse en Montevideo, con más de 22 kilómetros de costa, o ir a los balnearios de la costa Atlántica.Pero Montevideo no es sólo un lugar para descansar y vivir un estilo de vida más tranquilo. También es una ciudad llena de vida, con una gran cantidad de restaurantes, bares, pubs y clubes. Durante el día, un punto de gran interés para aquellos que realizan turismo en Uruguay, así como para la mayoría de los lugareños, es el Mercado del Puerto, un lugar para la celebración que es famoso por su excelente oferta cultural y gastronómica.
El Mercado del Puerto de Montevideo se encuentra frente al puerto principal de la ciudad, justo al lado del Museo del Carnaval, en la zona histórica o antigua del barrio de Ciudad Vieja. La entrada principal es a través de la calle peatonal Pérez Castellanos, aunque se puede acceder a él también desde el puerto, cruzando la carretera.
Ideas sobre qué comer y qué tomar
El Mercado del Puerto es un lugar ideal para degustar la deliciosa gastronomía de Uruguay. Se trata de un paraíso para los amantes de la carne, un lugar donde se puede disfrutar de una gran “asado” o barbacoa a base de carne de vaca, pero que también puede incluir carne de cerdo, cordero, pollo, verduras y queso provolone. También se ofrecen mariscos y pastas en variedad de presentaciones. Los vegetarianos se encuentran a gusto con las deliciosas opciones de barbacoa vegetariana y ensaladas que se ofrecen.
Los platos son muy grandes, a veces lo suficientemente grandes como para ser compartidos por dos personas. Si se siente muy lleno después de comer la mitad de su plato y le gustaría guardar un poco de su delicioso plato para disfrutar más tarde, pregunte a su camarero o camarera y él / ella preparará un paquete para que usted pueda llevar a su casa u hotel en Uruguay el resto de su comida.
En cuanto a las bebidas, el Mercado del Puerto ofrece buenas cervezas y vinos uruguayos, con varias opciones para que usted pueda elegir la que más le plazca. Si usted es de aquellos que realmente disfrutan cuando viajan, de actuar como lo hacen los locales, y quiere hacerlo durante su viaje a Uruguay, asegúrese de pasar por el restaurante Roldós y pedir un “Medio y Medio”. Esta bebida nacional se compone de 50% de vino común y 50% de vino espumoso, por lo que resulta adecuada para todas las celebraciones. Existen variantes en tinto, roso y blanco para atender todos los gustos y preferencias.
Toda buena comida termina con un buen postre. El “Postre Chajá” y el “Massini” son algunas de las delicias locales ofrecidas. Si quiere algo más ligero, los uruguayos en general piden una sabrosa ensalada de frutas, alguno de los helados o una combinación de ambos.
Un poco de historia
Hay varias leyendas urbanas sobre el origen del Mercado del Puerto. Se dice que la estructura de hierro, que llegó a Montevideo en un buque procedente de Liverpool, Inglaterra, fue pensada originalmente para ser una estación de tren en Bolivia, o en una ciudad en la costa del Pacífico. De acuerdo con estas historias, ya sea un naufragio o cuestiones jurídicas relativas a los impuestos fueron la causa de que la estructura se dejara en Uruguay a principios de los años 1800, para luego ser comprada y convertida en el Mercado del Puerto.
Los historiadores, en cambio, dicen que el área donde el Mercado del Puerto se encuentra actualmente fue comprada en 1865 por una empresa privada que proyectaba construir un mercado en Montevideo. Un ingeniero Inglés estuvo a cargo de la supervisión de la construcción de la estructura metálica, que era la técnica de vanguardia en Europa en ese momento, utilizada por ejemplo en 1889 en la Torre Eiffel.
El Mercado del Puerto fue inaugurado en 1868 y previsto como un lugar donde vender frutas, verduras y carne a quienes llegan a la costa en barco, así como para las familias ricas que estaban construyendo sus casas en los alrededores en ese entonces. Finalmente, el mercado no se utilizó para estos fines. Los vendedores de las frutas, verduras y carne pronto convirtieron sus stands y tiendas dentro del mercado en restaurantes.
Un ambiente para no perderse
El Mercado del Puerto es diverso y heterogéneo. Su estructura metálica reúne una mezcla de colores, gente y fragancias. Los lugareños, así como aquellos que realizan turismo en Uruguay, acuden al Mercado del Puerto para disfrutar de una comida, para comprar artesanías o para pasear y contagiarse de la agradable atmósfera. Una visita al Mercado del Puerto es una buena forma de disfrutar de unas vacaciones en Uruguay, completando todo viaje a Uruguay.
El ambiente cultural incluye músicos, pintores y artesanos que trabajan en el Mercado del Puerto y luego venden sus obras allí. Los sábados, integrado en el programa turístico del Paseo Cultural de Ciudad Vieja, músicos, cantantes y dibujantes se encargan de animar y dar vida a este lugar.
Una gran multitud se reúne a menudo tanto en el interior del Mercado del Puerto, así como en el exterior, en la calle peatonal Pérez Castellanos y en la plaza de La Proa. Una feria de artesanías, souvenirs y antigüedades, instalada sobre la plaza, completa la oferta.
En algunas ocasiones, bandas de música brasileña, con el acompañamiento de bailarinas vedette también entran al Mercado del Puerto y circulan por los pasillos y restaurantes para entretener a las multitudes.
La víspera de Navidad y Fin de Año en el Mercado del Puerto
El ambiente festivo llega a su máxima expresión durante la hora del almuerzo y temprano en la tarde en dos fechas muy especiales: 24 de diciembre y 31 de diciembre. En realidad, casi todos los días en diciembre son muy concurridos en el Mercado del Puerto, dado que aquellos que trabajan en oficinas de Ciudad Vieja se reúnen con sus colegas y amigos para celebrar el final del año, los estudiantes que se reciben celebran con sus compañeros de clase, etc.
Durante los días 24 y el 31 aumenta la movida del Mercado del Puerto, con montones de botellas de Medio y Medio, vinos y cervezas vendidas en todo el lugar, la gente disfruta de las fiestas, baila al ritmo de la música y disfruta de la próxima celebración de la Navidad, diciendo adiós a un año y recibiendo el siguiente.
Fuera del mercado, en la calle peatonal Pérez Castellanos y la plaza de La Proa, se vende sidra de manzana bien fría en botellas de plástico de 1,5 litros que la gente compra para beber, pero sobre todo para agitar el contenido y esparcir el líquido por todo el lugar, dejando a todos los asistentes con sus ropas y cuerpos húmedos y pegajosos. Pero no se preocupe, un paseo por las calles de la Ciudad Vieja en estos días lo mantendrá limpio y fresco. Es costumbre que los lugareños festejen el fin de año y la navidad vertiendo agua desde las ventanas y balcones a quienes circulan por las aceras.Lo mejor es asistir a estos festejos temprano, poco después del mediodía. Con el paso de las horas, la locura y el festejo pueden ser demasiado. Tenga cuidado con los carteristas y no pase demasiado tiempo en Pérez Castellanos. Luego de un almuerzo y brindis en el mercado es mejor dirigirse a la calle Bartolomé Mitre, un poco más lejos, donde los guardias de seguridad garantizan una celebración más segura.
Es difícil escapar a la alegría de los uruguayos, así como la de los que realizan turismo en Uruguay, mientras bailan y beben dentro y fuera del Mercado del Puerto, disfrutando de la vida y las vacaciones en Uruguay
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