Así como en su momento El Arquiólogo nos trajo un repaso por las mejores historias de “El Increíble Hulk”, esta vez le toca el turno a nuestro trepamuros favorito,“El Sorprendente Hombre Araña”. Pasá y enredate en las telas de sus mejores aventuras.
Así como decía en el artículo sobre “El Increíble Hulk”, el “Sorprendente Hombre Araña” es una especie de amigo (o amistoso vecino) que me acompaña prácticamente desde que comencé a leer. Es sin duda mi personaje preferido del cómic, ya que considero que a pesar de tener la fuerza proporcional de una araña, entre otras muchas habilidades, prevalece sin duda su aspecto humano, con todo lo bueno y lo malo que el término implica.
Siempre llamaron mi atención sus constantes problemas económicos, la gran cantidad de conflictos que provocan sus familiares y amigos, su galería de excéntricos villanos y las distintas facetas de la famosa “suerte Parker”.
Al igual que en el artículo sobre el “gigante esmeralda” donde presentaba 10 historias que considero de las más importantes sobre el personaje, aquí propongo repasar algunas de las tantas que han sido significativas a lo largo de la gran “carrera” del Trepamuros pero que su vez me han marcado como lector arácnido, en cuanto guiones sí, pero también en algo a lo que considero fundamental al momento de hablar de cómics como lo es el aspecto artístico, ya que no tolero por mas buena que sea la historia, por más afamado que sea su guionista una historieta que no me agrade en su aspecto gráfico.
Para el presente informe han sido ordenadas cronológicamente y se tuvieron en cuenta los hechos anteriores al controvertido suceso conocido como “One More Day”.
!!!Atención, muchos SPOILERS!!!
#1.“Spider-Man!”
Amazing Fantasy # 15, Stan Lee & Steve Ditko, 1962
No podía faltar el primero de la serie. Es increíble como en 11 páginas Stan Lee & Steve Ditko fueron capaces de plasmar toda la esencia del personaje. Desde sus comienzos antes de la transformación, la picadura y el descubrimiento de sus poderes hasta la fatídica noche en que muere Tío Ben, todo rematado con una frase magistral que ha hecho historia en el mundo del cómic, “Un gran poder conlleva una gran responsabilidad”.
Stan Lee demuestra una vez más su gran imaginación que junto a su capacidad de trabajo lo convirtió en el mayor creador de superhéroes conocido hasta nuestros días. Por otro lado, sin ser un gran fan de Steve Ditko reconozco que su dibujo es un clásico y es él quien acierta en la creación del aspecto general del personaje (luego del “fracaso” de Kirby), que implicaba una imagen alejada del modelo tradicional prototípico del superhéroe clásico.
Sin lugar a dudas una historia fundamental para conocer la génesis del personaje de cómic más importante e influyente de la segunda mitad del siglo XX.
#2.“The end of the Green Goblin”
Amazing Spider-Man # 39-40, Stan Lee & John Romita Sr, 1966.
El aspecto más importante que considero surge de estos números es la llegada como artista de John Romita Sr. que luego del alejamiento de Steve Ditko (debido a sus diferencias con Stan Lee) se hace cargo de la colección. Importante creo, porque es Romita (quien quería dedicarse al entintado y fue convencido por Lee que continuara en el dibujo) junto a Mike Esposito en tintas, quienes darán imagen clásica y definitiva no solo a Peter Parker/Spider-Man y a algunos de sus clásicos enemigos, sino que también a personajes secundarios tan importantes como Gwen Stacy y Mary Jane Watson.
Romita Sr. se destacó tanto en el dibujo de la figura humana como en el de rostros, especialmente en cuanto a las chicas se refiere. Lee y Romita llevaron a “Amazing Spider-Man” a ser el titulo número 1 de la compañía destronando a Fantastic Four que hasta ese entonces ostentaba este galardón. Ambos números son protagonizados por héroe y villano, y es el propio Green Goblin quien descubre la identidad de Spider-Man a la vez que revela la suya. Norman Osborn cuenta la historia de su vida y luego del enfrentamiento final y debido a una amnesia olvida su condición de villano.
#3.“The Night Gwen Stacy died”
Amazing Spider-Man # 121-122, Gerry Conway & Gil Kane, 1973
Mucho se ha dicho sobre este arco y en particular sobre el #121 (cuyo título por razones obvias apareció al final del número) pero siempre llamó mi atención eso de que esta historia marcaba “el fin de la inocencia” en lo que al género de superhéroes se refiere.
A su vez se habló del fin (o comienzo) de una época o edad del cómic, pero lo importante aquí es la muerte del amor de la vida de Peter Parker a manos de Norman “Duende Verde” Osborn quien la arroja del George Washington Bridge*, que derivará luego del correspondiente enfrentamiento con Spidey en la aparente definitiva muerte del maléfico villano.
Las chicas no morían en los cómics, siempre eran rescatadas a último momento por su campeón. Este nuevo planteo es lo que provoca tal reacción en los fans. Pero terminar con la vida de secundarios importantes no era una novedad en “la casa de las ideas” ya que por ejemplo, el mismo Lee comenzaba la historia del arácnido con la muerte de su Tío en 1962. Por otro lado, otra pauta importante es marcada en la última página del #122 donde es prácticamente definido el futuro amoroso de Peter junto a Mary Jane.
Conway comenzó a escribir los guiones de Amazing Spider-Man en el #111 con solo 19 años, siendo autor de esta mítica historia donde las secuencias con grandes dosis de acción protagonizadas por Spider-Man son matizadas por otras donde Peter enfrenta los distintos conflictos de su vida personal, prestando gran importancia aquí a los protagonistas secundarios. Gil Kane es un excelente artista que continuó los lineamientos dejados por Romita Sr. quien curiosamente en estos números se encarga del entintado. Desde siempre me han parecido interesantes sus diseños de páginas y los planos que elije al diseñar sus viñetas.
Tan importante fue la muerte de Gwen Stacy que opacó totalmente la desaparición de su peor enemigo, ocurrida solo un número después, cosa que en la actualidad debido a la manera en que son manejados los “tiempos editoriales” transcurriría al menos con varios meses de diferencia.
Clásico instantáneo.
* (La anécdota en tanto a que puente era, ya que el dibujado es el Brooklyn Bridge, fue aclarada por Stan Lee quien confesó que siendo el editor de la época cometió un error al nombrarlo).
#4. “The original Clone Saga”
Amazing Spider-Man # 144-149 Gerry Conway & Ross Andru, 1975
Nuevamente nos encontramos con Conway escribiendo una sólida historia junto a Ross Andru (uno de los grandes dibujantes que han pasado por Marvel Comics) llevando a su máxima expresión “el estilo Marvel”; no debemos olvidar que la trama gira en torno a la clonación humana pero que se trata del año 1975.
Tan solo veintitrés números después de la traumática muerte transcurrida en aquellos números de 1973, la mismísima Gwen Stacy se presenta a la puerta del apartamento de un totalmente sorprendido Peter Parker. Este es el comienzo de la “Saga original del Clon” por la que transitan villanos “invitados” como Escorpión, Tarántula, y El Chacal quien en una jugada macabra traslada la acción a la cabecera del puente donde Gwen murió.
Mientras es revelada toda la historia sobre la clonación, entra en juego un clon del mismo Spider-Man el cual está convencido de ser el verdadero. El enfrentamiento final con sus enemigos termina con la muerte del Profesor Warren (Chacal) y de su propio doble, al tiempo que el clon de Gwen Stacy decide marcharse para nunca más volver. La confusión generada por los clones provoca en Peter una “crisis de identidad” que lo hace dudar sobre si es realmente o no el original, cuestión que se ve resuelta en el #150 (Archie Goodwin & Gil Kane) donde vemos al Trepamuros recurrir al Dr. Connors para resolver este dilema mientras enfrenta extrañas replicas de algunos de sus clásicos enemigos.
Finalmente en las tres primeras páginas del #151 (Len Wein & Ross Andru) se muestra la destrucción final del clon por un convencido Peter Parker sobre su verdadera identidad. Y aquí es donde tal vez, todo debió terminar.
#5. “Nothing can stop the Juggernaut”
Amazing Spider-Man # 229-230, Roger Stern & John Romita Jr., 1982.
Roger Stern es parte de la tercera generación de creadores que llegaron a Marvel a mediados de los setenta, que lo ha llevado a producir historias aun hoy en día para gran parte de los principales personajes de la editorial.
Por otro lado tenemos a John Romita Jr. quien todavía no ha encontrado su estilo característico (estamos aun ante un dibujo que continua con la tradición arácnida), pero ya es un gran artista que ha heredado de su padre la maestría en la ejecución de su trabajo y la gran capacidad narrativa.
Creo que se trata de un cómic paradigmático donde la calidad del artista es lo que prevalece, transformando ambos números en modelos más que interesantes de trama plagada de acción y destrucción y que sin dudarlo, si fuera director de cine, incluiría en mi versión cinematográfica de Spider-Man.
La idea de la que se parte es muy concreta: ante el pedido de Black Tom Cassidy, Juggernaut deberá capturar a Madame Web. Y por supuesto nada podrá detenerlo aunque para esto deba atravesar, si es necesario, “la gran manzana” de lado a lado. Spidey, por pedido expreso de Madame Web al presentir esta amenaza, intentará de mil maneras detener a este gigante para lo que utilizará diferentes medios, lo que es narrado gráficamente de una manera extraordinaria por un inspirado Romita Jr., llegando a un desenlace que ni el propio héroe hubiese imaginado.
Por otra parte considero que la portada del #229 es una de las mejor logradas de la historia de las cabeceras arácnidas, también obra de JR Jr.
#6. “The death of Jean de Wolff”
Spectacular Spider-Man # 107-110, Peter David & Rich Buckler, 1985.
Esta serie de cuatro números constituye uno de los primeros encargos que David recibe dentro de Marvel Comics, donde ya se percibe la gran capacidad creativa que mostraría en el futuro principalmente en Incredible Hulk. A pesar que el título revela el suceso clave de la historia, se mantiene el interés del lector mediante algunos giros en la trama que enriquece el resultado final.
Todo comienza con el asesinato de la Capitana Jean DeWolff, uno de los pocos policías en que Spider-Man confió alguna vez y con quien había entablado una especie de amistad. El autor conocido como “Sin-Eater” es un asesino en serie que elije sus víctimas entre personas relacionadas a distintos estamentos de poder.
Otra vez la muerte de un secundario cercano al Trepamuros desencadena la historia que no queda simplemente en eso, ya que un Juez, mentor del abogado Matt Murdock también conocido como Daredevil, corre la misma suerte que la Capitana DeWolff. Es así que comenzará una cacería de este asesino por parte de ambos héroes y que los llevara al punto del enfrentamiento, debido a una diferencia en cómo “tratar” a los delincuentes.
Por otro lado, Spidey descubrirá que despertaba cierto interés afectivo en la desaparecida policía. Es interesante como en cierto punto de la historia Matt Murdock descubre al escuchar los latidos cardíacos de Peter que estos coinciden con los de Spider-Man, información que utilizará en uno de los puntos culminantes de la historia, que termina con la confesión de su identidad al sorprendido Parker. A partir de aquí la relación de estos personajes (mis preferidos actualmente dentro de la “casa de las ideas”) no será la misma.
El arte de estos números corre por cuenta de Rich Buckler quien logra un tono apropiado con la historia que relata, en un muy correcto dibujo característico de la década de los ochenta. Si no me equivoco, fue elegida como la “historia de Spider-Man del año”, logro bastante interesante ya que fue publicada en uno de los títulos secundarios del arácnido y no precisamente en “Amazing”, su cabecera principal.
#7. “Kraven´s last hunt”
Amazing Spider-Man # 293-294; Spectacular Spider-Man # 131-132; Web of Spider-Man # 32-33, J.M. DeMatteis & Mike Zeck, 1988.
Desde siempre “Kraven el Cazador” estuvo obsesionado con capturar al escurridizo Spider-Man para convertirse así en “el mayor cazador de todos los tiempos”, objetivo que nunca ha conseguido, aún utilizando las pociones mágicas que lo dotan de increíbles poderes.
Esta obsesión lo ha llevado a la locura y a la humillación por ser incapaz de capturar alguna vez al arácnido, pero para su suerte, en un último intento, el desquiciado Cazador logra atrapar a su adversario y con su mente trastornada por el uso de alucinógenos termina enterrando vivo al Trepamuros !!!
Como era de esperar éste se liberará (tras dos semanas de permanecer bajo tierra) pero solo porque Kraven lo permitió, para así demostrarle su superioridad, cuestión que también lo lleva a suplantar a Spidey durante su ausencia y a capturar a Alimaña, un clásico villano de los ochenta al que nuestro héroe nunca pudo doblegar por sí solo.
DeMatteis nos ofrece aquí un relato de tinte psicológico, oscuro y salvaje que plantea algunos paralelismos entre sus protagonistas, con un desenlace que sale de lo común y es a su vez bastante original en tanto a muertes de villanos se refiere.
El artista encargado de esta saga que transitó por los tres títulos arácnidos de la época, no es otro que Mike Zeck con quien DeMatteis ya había trabajado en su etapa al frente de Capitán América. Zeck realiza un gran trabajo donde se destaca el expresionismo que caracteriza a la serie, ya sea en el manejo de luces y sombras o en la forma en que se muestran los diferentes estados emocionales, todo muy necesario para reflejar la violencia y la locura general que caracteriza esta obra.
Peter (recientemente casado con Mary Jane) toma definitivamente aquí conciencia de su propia muerte, en una historia catalogada por Wizard en algún momento como la mejor escrita alguna vez sobre el arácnido.
#8. “The Child Within”
Spectacular Spider-Man # 178-183, J.M. DeMatteis & Sal Buscema, 1993.
Al igual que en "Kraven´s last hunt", J.M. DeMatteis nos enfrenta a otra historia cargada de tensión psicológica e insania. La trama se estructura a través de la vida de tres personajes que comparten el peso protagónico en esta historia.
Cada número comienza mostrando a Alimaña (o Vermin, como se conoce originalmente), un asesino mutante creado por el propio DeMatteis, que se alimenta de sus víctimas, en tratamiento psicológico y con un oscuro pasado relacionado aparentemente al abuso infantil. Otro de los protagonistas es nada menos que Harry Osborn atormentado por las apariciones fantasmales de su padre que obviamente se producen en su propia mente y quien “obliga” a Harry volver a convertirse en el Duende Verde y atacar a Spider-Man.
Por último, encontramos a Peter Parker quien continúa sin resolver el oscuro pasado relacionado a la desaparición de sus padres, al tiempo que deberá lidiar con el ataque de Harry que lo somete a un gas alucinógeno que complica aún más las cosas y capturar al descontrolado Alimaña que intenta asesinar a su familia.
Sal Buscema (dibujante totalmente subvalorado si los hay) es uno de mis artistas favoritos cuando hablamos del Trepamuros. Con un estilo que tiende a sintetizar y rectificar las formas, logró una imagen de Spider-Man que me parece perfecta. También considero que es insuperable en cuanto al dibujo de los hilos de tela arácnida y en la imagen que logra de las chicas, que noto particularmente en Mary Jane.
Especialista en el manejo de la secuencia narrativa, pienso que cualquier artista que quiera hacerse cargo del arácnido debería estudiar la manera en que este autor plasma sus posturas, su agilidad y movimientos. No en vano, elegí para mi avatar multiversero parte de un dibujo de este artista.
Asimismo, DeMatteis demuestra aquí que maneja a la perfección temas complicados como la locura, la ira y el abuso infantil, en seis números que giran en torno a las relaciones humanas y en particular a la de padres e hijos.
#9. “Spider-Man Blue”
Spider-Man Blue #1-6, Jeph Loeb & Tim Sale, 2002.
Esta historia, única de las elegidas que no fue editada en uno de los títulos principales del arácnido, apareció como una miniserie de seis entregas y fue publicada en el año 2002.
Es el día de San Valentín. Las historias una vez contadas por Stan Lee, Steve Ditko & John Romita Sr. en los sesentas son aquí relatadas por un apesadumbrado Peter Parker quien graba a modo narración/confesión su versión de los hechos, de cómo conoció y se enamoro de quien pienso considera (y yo coincido) el amor de su vida, Gwen Stacy.
Aquí nos enteramos entre otras cosas de un ritual que Peter realiza todos los 14 de febrero que consiste en dejar una rosa roja en la cabecera del fatídico puente donde todo terminó, de los primeros encuentros con Gwen, pero también de cómo conoció a la que se convertiría a la postre y como consecuencia de la muerte de la primera, en su esposa, Mary Jane Watson.
Parker también cuenta aspectos de su relación con muchos personajes secundarios de la serie como Flash Thompson o Harry Osborn y relata varios enfrentamientos con algunos de sus clásicos oponentes.
Considero que estamos ante uno de los mejores, sino el mejor cómic realizado por esta pareja de creadores, en una historia increíblemente narrada con guiños constantes a sus autores originales tanto en guión como en dibujo, donde el propio Sale confiesa que algunas de las páginas le llevaron el doble del tiempo habitual al buscar un equilibrio entre su propio estilo y el del “maestro” (como él lo llama) Romita Sr.
Con muchas de las magnificas viñetas ilustradas por Sale podría perfectamente uno hacerse un cuadrito y colgarlo en la pared.
Una mención especial para el colorista de la serie Steve Buccelatto, quien a mi gusto dicta cátedra en cuanto a lo que colorear un cómic se refiere.
#10. “Happy Birthday”
Amazing Spider-Man Vol 2 #57-58 & Vol 1 #500, J Michael Straczynski, John Romita Jr. & John Romita Sr., 2003.
Por último llegamos a la polémica etapa de Strac al frente del principal titulo arácnido. Mucho se ha escrito sobre su “run” y coincido con que ciertas historias son bastantes controvertidas. Particularmente rescato la etapa junto a Romita Jr. y, dentro de ésta, las historias en que Ezekiel (siempre lo odié) no interviene.
Siempre disfruté de cómo Strac presenta al personaje, lo conoce muy bien, maneja increíblemente sus reacciones y estados de ánimo, así como el particular humor del Trepamuros.
Estamos ante una historia muy importante ya que se volvía a la numeración original de la serie en el #500, y de la que nunca debió haberse alejado.
En la parte artística estamos ante un John Romita Jr que esta “on fire”, totalmente maduro y con su estilo completamente definido y demostrando en cada página por que es conocido como “el hombre que nació para dibujar Spider-Man”. Nadie como él es capaz de captar la dinámica y movimiento que un personaje como Spidey necesita. Estamos ante un maestro en el montaje de páginas, especialmente en su unidad visual y continuidad narrativa. Tengo una particular debilidad por las doble-páginas de este artista quien aprovecha al máximo este recurso de una manera que pocos logran igualar.
Todo comienza con Peter Parker al frente de una clase de la que es profesor de biología y donde lo notamos feliz con su trabajo, ya que a su vez la relación con Mary Jane atraviesa por un buen momento.
De un momento para otro comienzan a caer del cielo una suerte de copos de nieve, seres conocidos como los “sin mente” provenientes de otra dimensión. Este suceso llevara a Spidey junto con otros importantes personajes Marvel como Thor, Cíclope, Capitán América y Dr. Extraño, entre otros, a intentar detenerlos.
En medio de la batalla, Spider-Man y el Dr. Extraño (personaje muy participativo en la etapa de Strac) son transportados al vacío pre-creación fuera del tiempo y el espacio. El estar en este lugar permite que Peter presencie distintos momentos de su línea temporal de vida pasada y futura.
Romita Jr. explica que las escenas clásicas presentadas como flashbacks han sido reinterpretadas, lo que no dejó de generar alguna polémica.
De vuelta en New York (dimensional y temporalmente) logran detener la amenaza de los “sin mente” y Peter regresa a su hogar donde lo esperan Mary Jane y Tía May para celebrar su cumpleaños, no sin antes que el Dr. Extraño le entregue un obsequio muy especial, que dejo en ustedes averiguar de qué se trató.
Y es aquí donde los fans (aparte de la gran oportunidad que se le presenta a Peter) tenemos nuestro regalo ya que las últimas cuatro páginas están dibujadas nada menos que por John Romita Sr.
Simplemente espectacular.
Bonus Track. “The Kid Who Collects Spider-Man”
Amazing Spider-Man #248, 1984, Roger Stern, Ron Frenz, 1984.
El protagonista de esta mini historia es un niño fanático de Star Wars y que colecciona Spider-Man (para no sentirse uno identificado). Su colección obviamente no es de cómics sino que se trata de recortes, artículos periodísticos y todo lo coleccionable sobre el Trepamuros.
Spidey visita a Tim en 11 páginas magníficamente narradas por Stern y Frenz, quienes estructuran la historia intercalando un artículo del periódico sobre el chico, con el diálogo entre ambos. El héroe relata gran parte de su vida así como el sentimiento que lo impulsó en su lucha contra el mal, revelando aquí muchos de sus secretos. Al mismo tiempo se muestra claramente la naturaleza humana de Spider-Man, que lo define y diferencia del resto de los de su clase.
Dejo que aquellos de ustedes que no han leído aún este clásico descubran el desenlace de esta increíble historia, maravilla que no podía quedar afuera, siendo esta la razón de este bonus track.