Miami (EEUU), 31 may (EFE).- Los "Big Three" y la defensa al mejor estilo Pat Riley fueron las claves que dieron a los Heat de Miami la victoria por 92-84 ante los Mavericks de Dallas en el primer partido de las Finales de la NBA.

El protagonismo del alero LeBron James, el escolta Dwyane Wade y el ala-pívot Chris Bosh, junto al juego defensivo que realizó todo el equipo, hizo posible que los Heat fuesen poco a poco minando la resistencia de unos Mavericks, que lucharon de principio a fin, pero al final no pudieron evitar la derrota.

Si Bosh fue el jugador que mantuvo a los Heat en el partido durante la primera mitad con 13 puntos, James se encargó de tomar el testigo para liderar al equipo como máximo encestador con 24 tantos, nueve rebotes y cinco asistencias.

El triunfo tuvo un significado especial para James al convertirse en el primero que consigue en unas Finales de la NBA después de haber sido barrido (4-0) con los Cavaliers de Cleveland en las que disputó frente a los Spurs de San Antonio, en el 2007.


Wade respondió a los rumores sobre sus supuestos problemas físicos con otro partido serio en el que fue el jugador más completo al aportar un doble-doble de 22 puntos, 10 rebotes, seis asistencias y dos tapones.

Bosh también reivindicó su clase y talento al conseguir 19 puntos, nueve rebotes, tres asistencias y un tapón.

También destacó en los Heat el base reserva Mario Chalmers al anotar 12 puntos y encabezar la aportación del banquillo del equipo de Miami que lograron 27 tantos, incluidos cinco del ala-pívot Udonis Haslem, que iban a ser decisivos, por tan sólo 17 de los Mavericks.

Los Mavericks, por su parte, tuvieron al ala-pívot alemán Dirk Nowitzki como su líder y máximo encestador con 27 puntos (7-18, 1-2, 12-12), pero sin que pudiese superar el gran trabajo defensivo que le hicieron los Heat con doble y triple marcaje para que no tuviese facilidad en los tiros a canasta.

La estrategia del entrenador de los Heat, Joel Spoelstra, resultó porque el resto del equipo de los Mavericks tampoco respondió en el apartado ofensivo y sólo el alero Shawn Marion logró 16 tantos para ser el segundo titular que alcanzó dobles dígitos.

El escolta Jason Terry, sexto jugador de los Mavericks, tampoco pudo superar la gran defensa de los Heat y sus 12 tantos no iban a tener impacto favorable para su equipo en el marcador final.

Menos inspirado estuvo el base puertorriqueño Jose Juan Barea en su debut en unas Finales de la NBA, al jugar 18 minutos para aportar sólo dos tantos después de anotar 1 de 8 tiros de campo, repartió tres asistencias y recuperó un balón.

Los Heat iban a concluir el partido con un 39 por ciento de acierto en los tiros de campo, comparado al 37 de los Mavericks, que también perdieron el duelo bajo los aros al capturar 36 balones por 46 del equipo de Miami.

Los Mavericks habían aguantado bien durante la primera parte el duelo físico entre ambos equipos para irse al descanso con la ventaja parcial de 43-44, gracias a los 13 tantos que anotó Nowitzki.

El equipo tejano siguió inspirado al inicio del tercero para lograr racha de 7-0 que le dio ventaja parcial de ocho puntos (43-51), la mayor que iban a tener en el partido.

Sin embargo, los Heat con Wade, que hizo dos penetraciones consecutivas, volvieron a meterse en el partido y al final iban a concluir el tercer periodo con una ventaja de cuatro tantos (65-61) después de un triple de James cuando sonaba la bocina.

La acción de James iba a ser de nuevo decisiva para los Heat, que comenzaron el cuarto periodo con un triple espectacular del escolta Mike Miller (68-63), Nowitzki había anotado dos tiros de personal, y abrir el camino del triunfo producto de una labor de equipo en la que el protagonismo de los "Big Three" en los nuevos Beach Boys iba a ser decisivo.

El segundo partido de la serie al mejor de siete se jugará en el mismo escenario del American Airlines Arena, de Miami, el próximo jueves.